martes, 25 de septiembre de 2007

El espacio sin tiempo

Nos movemos en el aire y en dirección a la nada, y aún así somos felices. Capaces de cerrar los ojos, de callar y dejarse llevar. Somos como aire perdido en el vacío. Y en esos momentos nada existe a nuestro alrededor, el tiempo se detiene, el reloj ya no corre, no se puede seguir mintiendo porque en el tiempo sin espacio todo es realidad, todo es de verdad.
Después nadie sabe, nadie recuerda muy bien, y hacemos como que olvidamos, como que todo fue un sueño, pero sabemos que del tiempo sin espacio nadie se salva. Comienza cuando tu o yo nos recordamos, o tal vez comienza cuando tomas el rumbo en dirección contraria, en algún momento algo pasa, el sol salió más tarde aquel día, decidiste hacer algo que no estaba en tus planes, no lo se. Si lo supiera, lo haría.
Es el movimiento donde no hay espacio, se pierden las dimensiones, los sentidos, es el movimiento que no podría existir, pero existe. Es un secreto, que queda guardado en el corazón, que uno puede recordar y recordar, pasar horas recordando lo que fue, y esperando a que vuelva algún día. Somos lo que se pierde, somos el tiempo, somos aire y somos fuego, y queremos que el tiempo nos una, pero tememos al espacio.